Los grandes proyectos de infraestructuras se diferencian de otros trabajos de construcción principalmente debido a su escala, complejidad y largos plazos, por lo que su coordinación puede plantear retos, sobre todo entre los múltiples equipos que suelen participar. Ahora bien, la metodología BIM puede ayudar a resolver algunos de estos aspectos facilitando un entorno colaborativo y garantizando que el diseño, la construcción y la gestión de proyectos de infraestructuras a gran escala sean mucho más eficientes, precisos y puntuales en comparación con los métodos de entrega tradicionales.
Los singulares desafíos de los grandes proyectos de infraestructura
Todos los proyectos de construcción se enfrentan a retos similares, como equipos dispares, limitaciones de presupuesto y tiempo, cambios en el alcance, etc., pero estos desafíos se magnifican en el caso de los grandes proyectos de infraestructura debido a su gran escala. Por ejemplo, los calendarios de diseño y construcción necesarios para este tipo de proyectos son más largos que los de obras más sencillas, y a su vez, puede haber cambios adicionales a medida que el proyecto evoluciona durante su vida útil, que puede abarcar varios años. Cada cambio requiere nuevos planos y aprobaciones de varias partes interesadas, y a menudo este proceso se repite varias veces a lo largo de la duración del proyecto.
Aunque todo proyecto suele implicar a varias partes interesadas, la complejidad y la dimensión de los de infraestructuras hace que este número aumente considerablemente. La gestión del elevado número de equipos y disciplinas implicadas requiere una colaboración eficaz, que puede ser difícil de gestionar utilizando los enfoques tradicionales de comunicación y 2D. Cada una de estas disciplinas utiliza su propio software especializado para su sección de las obras, que puede no ser compatible con el software de otros equipos. Por lo tanto, compartir la información entre los miembros del equipo puede ser difícil y llevar mucho tiempo si hay que volver a crear la información en otro programa de CAD 3D.
Las ventajas de la metodología BIM en los proyectos de infraestructuras
BIM permite superar estos desafíos para que la entrega del proyecto sea eficiente, colaborativa y exitosa. Aunque la mayoría de las veces se le asocia con el modelado 3D preciso, en realidad es una metodología de trabajo que tiene otros beneficios que van más allá del de una herramienta mejorada de dibujo y diseño.
CDE (Common Data Environment)
Una de las principales ventajas de la metodología BIM para infraestructuras es que debería facilitar un entorno de datos común o CDE (Common Data Environment), que permite que todas las disciplinas trabajen a partir del mismo modelo, garantizando al mismo tiempo que todos utilicen la versión más actualizada. También ayuda a gestionar la documentación del proyecto, que puede resultar engorrosa debido al gran volumen de información que se genera a lo largo de la vida del proyecto. Un CDE puede contribuir a automatizar este proceso al tener una única fuente de verdad que se mantiene consistente en todas las aportaciones del equipo.
Intercambio de datos sin fisuras
Open BIM es un estándar universal que admite el intercambio de datos entre diferentes herramientas de software BIM sin importar el fabricante. Una plataforma colaborativa open BIM, como ALLPLAN Bimplus, utiliza IFC para democratizar los datos mediante la importación de archivos o datos generados por otros programas, sin perder información, lo que elimina la necesidad de que los distintos equipos utilicen el mismo paquete de software para colaborar de forma eficaz. Cada disciplina puede utilizar el software de su elección para crear su elemento de las obras, sin dejar de tener su sección perfectamente incorporada en el modelo completo del proyecto.
Detección de colisiones y gestión de cambios
Con la metodología BIM, detectar colisiones es mucho más fácil que si se utilizan métodos de dibujo en 2D y se confía en las inspecciones visuales. La visualización que permite un modelo 3D hace que sea mucho más fácil para todas las partes entender cómo su elemento de las obras encaja en el panorama general. Además, al trabajar todos con el mismo modelo actualizado, no se producen conflictos involuntarios por utilizar una versión anticuada. También hace que los cambios de alcance sean mucho más fáciles de gestionar e implementar, ya que el impacto de cualquier cambio está inmediatamente disponible para todas las partes y cualquier colisión se destaca en el software, que supervisa constantemente la integridad estructural del modelo. Esto garantiza que los errores se rectifiquen antes de que se descubran en la obra, lo que supondría una valiosa pérdida de tiempo, dinero y materiales.
Metodología BIM para infraestructuras en la práctica
Los megaproyectos de infraestructuras son esenciales para satisfacer las necesidades de transporte y servicios públicos, por lo que es fundamental que su diseño y ejecución garanticen la viabilidad y seguridad a largo plazo. En teoría, la metodología BIM para proyectos de infraestructuras promete muchas ventajas, pero ¿cómo funciona en el mundo real?: proyectos de infraestructura emblemáticos han utilizado la metodología BIM y las soluciones de software BIM de ALLPLAN para superar retos que habrían sido imposibles de gestionar con métodos de dibujo estándar en 2D.