Cómo puede ayudar el software BIM con las instalaciones fotovoltaicas
Building Information Modeling (BIM) se está convirtiendo en el método aceptado para entregar proyectos de construcción, ya que ofrece muchas ventajas al equipo de proyecto. Los clientes también se benefician de poder operar y gestionar sus instalaciones de forma más eficiente utilizando el modelo BIM una vez finalizada su construcción. A medida que esto se integra en nuestra forma de construir, la siguiente generación BIM verá ciudades mejor planificadas y conectadas usando la metodología BIM a mayor escala. Así es como BIM puede contribuir al futuro desarrollo de nuestras ciudades.
Planificación eficiente de ciudades
Una de las principales ventajas de utilizar la metodología BIM es poder ver una representación digital de la estructura en su contexto urbano. Esta visualización ayuda a eliminar las colisiones entre los distintos elementos del edificio y entre las características o estructuras existentes en el terreno. En cuanto a la ciudad, esto puede ayudar a sus planificadores a trazar eficazmente el espacio disponible y comparar las novedades con su entorno sugerido. Los edificios y la infraestructura pueden verse y probarse, permitiendo modelar e incluso ajustar su funcionamiento antes de que se construyan.
De forma similar, un modelo BIM contiene toda la información sobre una estructura. A mayor escala, un modelo BIM de la ciudad contendrá la información que los diseñadores urbanos necesiten para realizar análisis y evaluaciones de nuevos proyectos. Tener acceso a un modelo de ciudad rico en información hará que el proceso de planificación sea más eficiente a la hora de reducir la falta de información. También es posible desarrollar mejores estrategias de planificación urbana, ya que se puede obtener una imagen completa de los distritos vecinos y los servicios existentes del modelo BIM de la ciudad.
Conectar BIM con los SIG (Sistemas de Información Geográfica) proporciona a los interesados —políticos, ingenieros e inversores— un conjunto de herramientas potentes que permite un mayor nivel de comprensión, exposición e interacción durante el proceso de planificación de la ciudad y la infraestructura. La metodología BIM tiene la capacidad de proporcionar más transparencia a los procesos de decisión política y mejorar la satisfacción de los ciudadanos respecto a los lugares donde viven y trabajan.
Aquí tienes algunos ejemplos de la vida real de cómo el modelado BIM puede ayudar a mejorar nuestras ciudades:
Análisis de visibilidad para encontrar el lugar óptimo en el que colocar una cámara de vigilancia.Estimar la proyección de sombras de los distintos elementos urbanos con el fin de determinar las envolventes solares y las condiciones de iluminación.
Estimación del ruido esperado en un entorno urbano para una mejor planificación del tráfico.
Mapas de propiedades 3D e información (encuestas catastrales) para un registro de propiedades más preciso.
Visualización para la navegación y mejor planificación de señales de información.
Mejora de la planificación urbana que incluye más zonas verdes.
Visualización para visitas virtuales y construcción más eficiente.
Mejor respuesta a emergencias, con rutas de evacuación planificadas con precisión.
Predicción de la calidad del aire con la dinámica de fluidos computacional.
Estimación de la población de un área para la gestión de crisis.
Logística y sistemas de ruteo mejorados a medida que la conectividad y el tráfico se entienden mejor.
Metodología BIM para ciudades conectadas
A medida que el Internet de las cosas (IoT por sus siglas en inglés), los sistemas de información geográfica (SIG), el big data y el aprendizaje automático sigan ampliando sus usos, tendrán innumerables aplicaciones para las ciudades. La monitorización en tiempo real de los sensores es solo una de las muchas ventajas que podría tener una ciudad conectada. La información de los sensores habilitados para el IoT es capaz de transmitir datos que luego pueden analizarse para determinar los patrones y las funciones pueden ajustarse para adaptarse a las condiciones locales. Por ejemplo, los semáforos pueden incorporar sensores que controlen los flujos de tráfico de una ruta y ajusten los tiempos para mantener un flujo circulatorio fluido. Con el aumento de los vehículos autónomos, un sistema de gestión de tráfico conectado puede ajustar la velocidad de los vehículos y dirigir los coches a los espacios de estacionamiento desocupados.
Existen numerosas aplicaciones de conectividad, pero es necesario que exista una forma coherente y unificada de compartir los datos para que se puedan tomar decisiones bien fundadas. Ahí es donde el modelo BIM de una ciudad contribuye proporcionando una plataforma abierta para una base de datos de la ciudad rica en información. Sin este enfoque cohesivo, los datos simplemente se almacenarían y los beneficios de conectividad serían menores. La recopilación y el uso compartido de datos en una ciudad conectada puede ayudar a mejorar tanto los edificios y las infraestructuras como la atención sanitaria, la seguridad y el medio ambiente. Un modelo BIM de la ciudad será una poderosa herramienta para coordinar diseños, servicios y programas de mantenimiento, proporcionando, esencialmente, un modelo de activos digitales que se alimente con información y mejore continuamente.
Ciudades del futuro
La metodología BIM ya no es nuestro futuro, es nuestro presente. Pero todavía se está determinando su evolución y el papel que desempeñará en hacer que nuestras ciudades sean más inteligentes y sostenibles mejorando así nuestra calidad de vida. Sin embargo, está claro que la tecnología digital y el modelado BIM transformarán la forma en que diseñamos, construimos y gestionamos nuestras ciudades.