BIM para infraestructuras: guía práctica

Utilizar BIM para infraestructuras es una gran solución para poner fin a muchos de los problemas asociados a este tipo de obras, como retrasos, sobrecostes, etc. En este artículo, vamos a mostrar las ventajas de emplearlo y daremos algunos ejemplos prácticos. Además, haremos un repaso a algunos de los retos que habrá que abordar en el futuro.

En los últimos años, infraestructuras como carreteras, puentes, túneles, ferrocarriles o redes de servicios públicos ya se están diseñando, casi en su totalidad, con esta metodología. Y es que, a diferencia de lo que ocurre con los enfoques tradicionales, la metodología BIM para infraestructuras ofrece modelos digitales de gran detalle y precisión. Asimismo, su uso no se centra en el proceso de construcción o diseño, sino que se extiende a lo largo de todo el ciclo de vida de la infraestructura.

Vamos a ver todas sus aplicaciones:

• Trabajos de diseño y planificación. Visualizar el proyecto en su entorno real es muy útil al licitar las obras públicas, y es algo que BIM para infraestructuras hace a la perfección. Desde la etapa inicial permite realizar un diseño conceptual para mejorar la toma de decisiones sobre materiales, eficiencia energética o acabados.
  
• Modelado 3D y simulaciones. Los modelos detallados de BIM son fundamentales para analizar cómo impactan las condiciones climáticas o geológicas a las infraestructuras. Además, al simular los diferentes escenarios, se pueden encontrar las mejores soluciones desde el punto de vista técnico o sostenible. Esto facilita obras más económicas y eficientes.
  
• Tareas de construcción. Una vez se ha completado el diseño del proyecto, llega el momento de comenzar los trabajos sobre el terreno. Aquí también puede aprovecharse BIM para coordinar los equipos y distribuir mejor los recursos. Esto ayuda a llevar al día el cronograma y reduce los conflictos en la obra.
  
• Mantenimiento. Gracias al uso de sensores IoT, o a los distintos parámetros preconizados por los fabricantes de algunos materiales, resulta más fácil gestionar correctamente los trabajos de mantenimiento de las infraestructuras. Y todo ello se puede hacer directamente en la plataforma BIM.

Implementar BIM en infraestructuras proporciona múltiples beneficios:

• Mejor coordinación y colaboración. Todos los actores involucrados en el proyecto pueden trabajar sobre un modelo único y actualizado.
  
• Reducción de errores y costes. Detectar de manera temprana los problemas tiene un impacto significativo sobre los costes, ya que resulta mucho más económico evitar los retrabajos en la obra.
  
• Sostenibilidad. Evaluar el impacto ambiental es otra de las cualidades de estas aplicaciones. Puede optarse por materiales km 0, es decir, fabricados cerca de la infraestructura, o soluciones como el asfalto reciclado en las carreteras. Por medio de los parámetros introducidos en el sistema, se puede comprobar cómo afectan a la infraestructura y cuál será su durabilidad.

El Ayuntamiento de Madrid ha sido pionero en el uso de BIM para infraestructuras en sus obras públicas. Carriles bici, puentes y obras de peatonalización en la ciudad se llevan a cabo mediante este método de trabajo. Y para comprobar la escalabilidad de estas herramientas, un gran ejemplo es la Torre Shanghai, en China. Su construcción y diseño se hicieron por medio de BIM para edificios y es, en la actualidad, el edificio más alto del país asiático.

A pesar de sus múltiples ventajas, adoptar BIM en las grandes obras todavía se enfrenta a diversos desafíos:

• Integración con tecnologías existentes: Esto resulta especialmente costoso cuando es preciso retomar proyectos que ya se habían diseñado o realizado con otros métodos. En el futuro, cada vez más utilizarán de forma nativa BIM, lo que solventará este reto.
  
• Capacitación y adopción: Todavía hay profesionales que no conocen en profundidad BIM y eso puede dificultar el salto a esta metodología. No obstante, es crucial reseñar que su curva de aprendizaje es muy rápida, por lo que no es difícil aprender a usar estos programas en poco tiempo.
  
• Normativas y estándares: Aún no hay una legislación unificada en la construcción. Esto complica la interoperabilidad y la colaboración entre equipos a nivel internacional. Todo ello resulta más grave en el caso de las licitaciones en territorios extracomunitarios, como Oriente Próximo o América.

El uso de BIM para infraestructuras ya no es solo una opción. Se trata de una necesidad para los ingenieros y técnicos implicados en este tipo de obras. Sus ventajas son significativas y su aplicación parte desde la fase de diseño pasando por todo el ciclo de vida de la construcción. Aunque todavía hay algunos retos por superar, el avance requiere de esta tecnología.