La metodología BIM cada vez se emplea en una mayor cantidad de proyectos y ahora también tiene un fuerte impacto en los procesos de licitación. Los programas que usan este método de trabajo no solo son excelentes al representar en 3D cualquier edificación, sino que permiten reducir los costes operativos de cada obra y también minimizan los errores durante su planificación y construcción. Todos estos aspectos se tienen en cuenta, pero hablaremos sobre ello en profundidad en este artículo.
Metodología BIM en procesos de licitación
Una de las principales ventajas de los proyectos que emplean BIM como base para su diseño es que facilita a los técnicos presentar propuestas optimizadas y precisas. Y es que se tiene en cuenta cada detalle al realizar el modelado para que se ajuste a la realidad tanto en lo relativo a los costes de cada material como a su comportamiento. Esto hace mucho más fácil la decisión a las Administraciones, puesto que cuentan con todos los datos necesarios para conocer el alcance presupuestario y la calidad del trabajo final.
¿Por qué los programas BIM ganan peso en las licitaciones?
Hay varios aspectos que hacen que el protagonismo de BIM vaya en aumento en las licitaciones, y de algunos de ellos ya hablamos al principio del post. En primer lugar, la mejora de la eficiencia que logran estos sistemas es una de las claves que decantan la balanza a su favor. Y lo mismo sucede con los gastos de los proyectos.
Al contar con información precisa sobre cada material necesario y la mano de obra que deberá emplearse para la construcción, se reduce el peligro de sufrir sobrecostes. Esto es algo muy valioso para quien licita la obra, ya que puede contar con un presupuesto que sufrirá pocas variaciones a lo largo de su ejecución. Por último, gracias al diseño de BIM, pensado para colaborar entre diferentes equipos, la comunicación es muy sencilla, algo que también disminuye los posibles errores.
Tal es la importancia que tiene BIM en las contrataciones que hace unos años se creó en España la Comisión Interministerial BIM. Su objetivo no era otro que fomentar el uso de esta tecnología en la licitación pública. Las conclusiones de esta comisión fueron muy significativas, ya que se concluyó que, al menos, el 23 % de los contratos eran susceptibles de emplear BIM. Los datos, no obstante, todavía están lejos de alcanzar este techo, como mostramos en el siguiente apartado.
Cifras que demuestran el auge de Building Information Modeling
2023 ha sido un año de récord en licitaciones de intervención de programas BIM, y prueba de ello es que se aprobaron hasta 532 proyectos con una inversión total de 2781 millones de euros. La cifra todavía supone un pequeño porcentaje del total de licitaciones, pero muestra un aumento significativo respecto a ejercicios anteriores.
Además, no todas las Administraciones y empresas públicas muestran todavía la misma confianza en BIM. ADIF ha sido la que más proyectos ha aprobado, seguida de cerca por el Ayuntamiento de Pontevedra. Si bien la tecnología ya es parte integral de los trabajos de construcción, Madrid está en cabeza del ranking por provincias con una inversión de 311 millones de euros durante el pasado año. Muy de cerca se encuentra Pontevedra con 289 millones de euros invertidos y completa el podio Navarra con 285 millones.
Sectores que usan BIM con mayor representación en las licitaciones
Por otro lado, aunque BIM puede emplearse para una amplia variedad de funciones, el 72,64 % de las licitaciones se destinaron a contratos de obras. Los servicios supusieron un pequeño porcentaje del 17,69 % y los contratos de tipo mixto tuvieron una presencia muy limitada con un 9,61 % de todos los firmados.
Metodología BIM en la obra pública
Como hemos visto en el apartado anterior, la incidencia de Building Information Modeling en las obras públicas es muy alta, ya que casi tres de cada cuatro inversiones se realizan en este ámbito. Cada vez es más habitual encontrar requisitos de BIM en las bases de los procesos de adjudicación de las licitaciones. Esto no solo ayuda a conseguir proyectos de una mayor calidad, sino que permite crear un registro digital completo que es muy útil a largo plazo para el mantenimiento de las infraestructuras públicas.
El incremento de la metodología BIM en los procesos de licitación no parece que vaya a frenarse a corto plazo. Las Administraciones públicas cada día confían más en estas herramientas para el desarrollo de sus proyectos, gracias sobre todo a sus importantes ventajas, y 2023 ha sido el año con un mayor número de licitaciones en las que se solicitaba BIM como requisito para la adjudicación. Todavía hay algunos organismos que no muestran demasiada confianza en este método de trabajo, pero conforme actualicen sus requerimientos técnicos, mayor será el crecimiento de las licitaciones con BIM.